Su pasión por la docencia la llevó de Ledesma a EEUU
29 DE MAYO 2022 – 01:02 Amelia Arraya Van Opdorp ejerce su profesión entre clases y charlas destinadas a niños y jóvenes.
Gracias a su constante entusiasmo por aprender y enseñar inglés, esta viajera de alma hace de la docencia su pasión, y de su vocación un servicio para niños y jóvenes de Estados Unidos.
Es que Amelia Arraya Van Opdorp, además de llevar sangre ledesmense, ha sido una privilegiada para vivir experiencias únicas a través de su profesión al frente de una clase. Gracias a su profesión, logró viajar por todo el país, Sudamérica y Europa, pero sin lugar a ninguna duda, Norteamérica fue la razón que la impulsó a seguir cumpliendo la función que tantas satisfacciones le brinda.
Es que gracias a las becas otorgadas por la comisión Fullbright Argentina, que permitió a los docentes de los IES entrar a ese programa de intercambios culturales aplicados a la educación, fue posible su viaje hacia la «Tierra de las oportunidades».
EN CLASES | CON NIÑOS DE LA ESCUELA PRIMARIA DEL CONDADO DE FAIRFAX, VIRGINIA
«Gané tres becas, una de ellas otorgada por el Departamento de Estado de USA, que consistía en venir y enseñar inglés por seis meses; tuve otra beca del Gobierno argentino a Innova College de Miami, bajo el programa ‘Viaje al extranjero para todos los docentes del nivel secundario y terciario de la República Argentina’ y estuve en Miami por dos semanas viendo la tecnología aplicada en clases», contó Amelia Arraya, quien se siente orgullosa de haber llegado hasta la cuna de la lengua que tanto le fascina estudiar.
«Otra beca la ganaron mis alumnos del profesorado y con la aplicación de lo que ellos aprendían, las transferían en proyectos binacionales de Libertador General San Martín y escuela de Reston, Virginia, que queda a veinte minutos de Washington DC», explicó la docente que expuso sus proyectos, además, en la Universidad de Filadelfia, junto a dos profesores de México y Estados Unidos en 2015.
EL CAPITOLIO | UNO DE LOS EDIFICIOS MÁS ICÓNICOS DEL PRIMER MUNDO
Así, el trabajo con el que soñaba Amelia se convirtió en una realidad gracias a la posibilidad de planificar proyectos, que logró consolidar de manera individual y colectiva en conjunción a sus estudiantes.
«Ante la honestidad y trabajo de los chicos del IES 10, dos alumnos hicieron el viaje a Estados Unidos y después les hice conocer la ciudad, es uno de los más grandes triunfos que he tenido», dijo Arraya, permanentemente involucrada con la multiculturalidad. La experiencia de vivir en un país de primer mundo crea expectativas y perspectivas diferentes a la hora de las vivencias, debido a la esencia cosmopolita que conlleva ser el centro de tantas culturas a la vez.
«Aquí existen programas de educación que tratan de incluir al extranjero que posea una lengua nativa que no sea inglés», sostuvo la docente que dio charlas en el Rotary Club de Washington DC.
Y es que asimilar otra cultura desde las relaciones interpersonales es un proceso muy difícil en el que Amelia fue adaptándose mejor a medida que fue pasando el tiempo. «Nosotros como argentinos somos mucho más abiertos a los demás y aquí es una vida de ciudad». Es que tener contacto con gente que habla diferente idioma, costumbres y estilo de vida significa adaptarse a ciertas reglas que no se tenían antes.
CASCADAS DEL RÍO POTOMAC | ATRACTIVO ENCANTADOR PARA TODO VISITANTE.
«Fue duro al inicio para mí, porque a veces quería volver, pero también tiene que ver mucho el apoyo y la contención que uno tiene aquí y eso te hace un poco más fuerte», aseguró la ledesmense sin dejar de lado la añoranza por sus amigas y la vida en Jujuy. «Aquí puedo tener todo lo que quiero, hermosos paisajes, puedo viajar, ir y venir, las casas son muy lindas, es bello el lugar, pero no es mi Ledesma, cuesta aceptar hasta que te acostumbras», contó la educadora.
«Lo que uno adquiere en cuanto a fluidez y el valor que le doy a la experiencia es el aprendizaje de las metodologías que emplean ellos para enseñar, para el manejo de aula, para el diseño curricular que tienen ellos, es una gran experiencia y que trato de transmitirla a mis colegas amigos», indicó Amelia, que junto a Marc, su esposo, ama la naturaleza y los bosques, lejos de la urbanización.
«Amo ir al mar, al río Potomac, el colorido total en primavera, los árboles son maravillosos», expresó la admiradora de ciudades como Filadelfia, Virginia del Norte y del Oeste, Carolina del Norte y del Sur y las Cataratas del Niágara.
En este mundo más globalizado, son distintas temáticas las que movilizan a Arraya. Estudia la inclusión y el respeto por las otras culturas, así como las diferencias.
«No dejo de extrañar Ledesma, pero estar aquí tiene su encanto. La parte de las playas del Golfo de México, subí las escalinatas de Rocky Balboa. Pero lo que más me impresionó fueron todas las montañas y el Cañón del Colorado. Los ríos son bellísimos, el Mississippi, por ejemplo, todos los ríos tienen su belleza. Nuestras cataratas son mejores que las del Niágara, porque son más selváticas», comentó la próxima visitante del parque Yellowstone.
Una vida ordenada es la que propone Estados Unidos. Y eso se valora muchísimo, ya que cuidan demasiado los tiempos del resto del mundo, es decir que si una reunión tiene que durar treinta minutos, dura ese tiempo.
El orden que tiene es muy bueno, la atención del público, la razón al cliente y al extranjero le exigen el pago de impuestos y la documentación como corresponde. «Como argentinos estamos bendecidos en ese aspecto porque tenemos mayor acceso a la vivienda y una buena atención médica. Como argentinos debemos valorar la educación gratuita tanto para estudiantes secundarios como universitarios y nuestra tierra que es tan rica y se extraña tanto», dijo nostálgica.
Nota de El Tribuno de JUJUT -by Lorena Cruz; disponible en:
https://www.eltribuno.com/jujuy/nota/2022-5-29-1-0-0-su-pasion-por-la-docencia-la-llevo-de-ledesma-a-eeuu